Yo no sé quién eres, te conozco pero todo lo que hay detrás de ti (y de mí) siempre
podría cambiar la perspectiva que tenemos uno del otro.
Sé que eres un imbécil
porque aguantas ser feliz y me da miedo saber que podrías postergarlo
ilimitadamente (y no por mí).
Sé que me amas y que
si no lo repites es porque no quieres descargar la seguridad de ese "te
amo", porque podría confundirme, podría hacer que piense que tienes
todo muy claro. Pero no te culpo, no lo hago en ningún momento y es porque
tanto amor a veces da miedo.
Tristemente te he
dicho antes que ya he sufrido suficiente y la verdad es que podría decidir no
tener más pero no quiero. Si amarte implica pasar por eso de nuevo y morirme
por dentro, entonces quiero que seas tú quien me mate mil veces más.
Probablemente después
de ti solo haya más de lo mismo, más de las personas que me cagan y es mi
culpa, es mi culpa enamorarme de alguien que sé que probablemente no esté tan
convencido como yo de querer intentarlo.
De repente se nos pase
la vida pensando que debimos estar juntos, yo qué sé, y quiero que sepas que si
en algún momento piensas eso, yo lo estaré pensando también.
Yo no quiero otra vida
para estar contigo, quiero esta, y así no sea ahora, siento que es lo que nos
merecemos.
Creo que para mí es
más simple porque yo jamás había considerado tener una familia con alguien
hasta que te conocí.
Incluso antes de que pasara algo pensé que eras el tipo de
persona con la que la vida me podría parecer un lugar más feliz. Y lo sigo
pensando, obviamente.
Me gustaría quitar ese
sentimiento de culpa de tu mirada porque cuando me miras solo queda paz, pero
yo no soy nadie para hacer eso.
La calma solo te la puedes dar tú, por mi lado,
yo estoy segura de toda la felicidad que te puedo dar.
Tenerte cerca es lo
único que puede hacerme feliz ahora, deja de preguntarme por lo demás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario